El ataque sexual quedó plenamente acreditado en esta primera instancia de la investigación por los estudios médicos, la declaración de la niña de 13 años y los informes psicológicos.
El hombre de 36 años que a principios de octubre había sido detenido por captar a una menor a través de una red social y abusar sexualmente de ella fue trasladado a una unidad penitenciaria luego de ser procesado por la Justicia Federal.
El juez Santiago Inchausti firmó el procesamiento en las últimas horas y de esa manera avaló lo realizado por la fiscalía federal N°2, oficina en la que se había recibido la denuncia pese a tratarse de un caso con competencia de la justicia provincial. Distintos detalles del episodio hicieron que la causa quedara en el fuero federal finalmente.
Tal como se publicara semanas atrás, el diálogo entre alumnas de una escuela y sus docentes fue el punto de partido para conocer la situación a la que se vio sometida una de las adolescentes de 13 años. En esas circunstancias la menor reveló que había sido contactada por un usuario de Instagram y que tras encontrarse fue abusada sexualmente. Esa persona era un hombre de 36 años.
De inmediato y a través del número telefónico 102 las autoridades escolares realizaron la denuncia y en menos de 48 se logró no solo identificar al abusador sino también detenerlo.
La labor investigativa estuvo a cargo de la DDI local y la jefa a cargo del Gabinete Antisecuestros de esa fuerza, Johana Dadin, con intervención del auxiliar fiscal de la Fiscalía Federal N°2, Hércules Giffi.
Las averiguaciones establecieron, en primer lugar, que el hombre de 36 años no utilizaba su verdadera identidad y que en su calidad de usuario de Instagram tenía preferencia de sumar seguidores menores de edad. En su mayoría eran mujeres adolescentes con las que iniciaba un intercambio inocente y general en un primer momento para luego avanzar ya de manera más personalizada.
Con esa maniobra logró captar a una niña de 13 años y consumar la agresión sexual. Sin embargo pudo saberse que otras dos menores también habrían sido víctima de mobbing (acoso con contenido sexual por medios digitales).
Tras presentarse la denuncia un informe de la licenciada Mila Montaldo, de la Oficina de Coordinación de Asistencia a Víctima de la Fiscalía General, y las conclusiones del cuerpo médico constataron signos compatibles con una situación de abuso sexual para una de las menores.
Al descubrirse la identidad del acusado se estableció que trabajaba como guardia de seguridad de un banco y que su actividad en la red social Instagram se vinculaba a colectar imágenes que serían de menores de edad, como así también diversos links de sitios eróticos.
El 7 de octubre pasado el hombre de 36 años fue detenido y al allanarse su domicilio se secuestraron dos computadoras y un teléfono celular.
Desde entonces y hasta el lunes último estuvo detenido en la comisaría de Balcarce, pero finalmente fue trasladado, al confirmarse su imputación a través del procesamiento, a la Unidad Penitenciaria Fedeal N°29 de Comodoro Py, en la ciudad de Buenos Aires.